jueves, 9 de octubre de 2014

Lanzamiento libro Fieltro de Autor

Éste es el día que mencioné en un post anterior, a la mañana siguiente de la inauguración de la exposición 16 artistas+Fieltro. Fue muy emocionante y entretenido, en especial, la Charla de Marjolein Dallinga. A continuación, algunas imágenes del evento:






Al término de la charla y antes del retiro de los libros, pudimos apreciar, visual y táctilmente, algunas obras de Marjolein... ¡¡¡Fue de otro mundo!!!:












 Me despido con mis obras, incluidas en este magnífico ejemplar, compartiendo un pequeño espacio con grandes artistas del fieltro en Chile... Es sólo un paso en este gran camino, con mucho por aprender todavía... Hasta otra oportunidad.


                                                                         

Noche de Arte+Fieltro...

A continuación, las fotos de la exposición 16 artistas + Fieltro, presente hasta el 19 de octubre en la Casona Nemesio Antúnez, en La Reina, Santiago:
















Y, aunque estuvieron sólo esa noche, algunas de las obras de Marjolein Dallinga:








sábado, 4 de octubre de 2014

Un gran día

Cómo cuesta, a veces, ordenar las ideas para escribir cuando ha sido un día tan emocionante y entretenido... Me encuentro en Santiago, ya que hoy fue el lanzamiento del libro "Fieltro de Autor", una obra que reúne los diversos objetos artísticos y de vestuario creados por las personas que trabajan este impredecible pero gratificante material en varias partes de Chile, y me siento muy contenta y orgullosa por formar una pequeña parte de este colectivo de seres apasionados por él, además de honrada de compartir junto a grandes exponentes de este arte textil. Sé que me queda mucho por aprender y crecer, sin embargo, hoy me sentí muy conectada e identificada con las personas que asistieron al lanzamiento, pese a no conocer a ninguna, en sus inquietudes hacia, por ejemplo, el darle valor a una obra o prenda, que fue la primera temática dictada, y después, con la emocionante charla que dio la gran artista Marjolein Dallinga, quien contó de sus inicios en este material y la evolución que experimentó hasta llegar a desarrollar sus obras tal como las hace en la actualidad, con paciencia (el fieltro es un trabajo difícil y, sobre todo, lento, expresó), observación, inspiración en la naturaleza, intuición y corazón, todos ingredientes necesarios, a mi parecer, de quien se dedica a expresarse a través del arte o la artesanía.
Me despido y dejo pendientes las fotos hasta que regrese a casa, con el corazón llenito por esta linda oportunidad y con ganas de seguir haciendo más, aprendiendo más, compartiendo más.

viernes, 5 de septiembre de 2014

Paso a paso...

Nuevamente, por aquí y, como anuncié en el post anterior, me creé una página en Fb de mis trabajos más recientes, llamada Brújula Fieltros, en donde iré compartiendo las fotos de este camino de lana que estoy recorriendo. Y la buena noticia de esta semana es que se vendió otra bufanda más y, según las dueñas del local que están recibiendo mis labores, están llamando la atención. Poco a poco, los caminos se abren, lento pero seguro, y eso me mantiene contenta y entusiasmada en seguir adelante.
Finalizo dejando algunas fotos de mis trabajos pasados, que decidí quedármelos para recordar cómo empecé, con mucho de incertidumbre pero también con ganas de aprender y de experimentar, y así mantener ese pedacito de niñez despierto para continuar, paso a paso, adonde me lleve este sendero...








sábado, 23 de agosto de 2014

Después de la lluvia...

De nuevo, por aquí. Han pasado varios meses desde la última vez que escribí, pero ya es hora de ponerme al día en varias cosas.
En este tiempo, he estado enfrentando una situación de salud que no esperaba y que, aunque está casi resuelta, me tiene en un reposo obligatorio que contrasta con las ganas de hacer cosas que vienen en oleadas pero, hasta que no me autoricen, seguirán dando vueltas en mi cabeza. Esto me ha hecho re-enfocar y repasar tanto lo hecho hasta el momento como lo que me falta y tratar de organizarme para lograr lo que quiero sin estresarme tanto. Es una tarea un tanto compleja, porque soy bastante perfeccionista, pero eso a veces me impide disfrutar del camino por estar pendiente de los detalles que faltan, sin embargo, estoy intentando relajarme a punta de meditación, reiki y... respirar, lento y profundo, para reducir  la ansiedad, según me dijo una conocida.
Pero no todo ha sido quietud y noticias desfavorables. También han habido buenas nuevas, como que postulé a un libro que se va a lanzar en octubre sobre fieltro. Aunque reconozco que fue de puro patuda, porque no llevo mucho tiempo fieltrando y me falta mucho más por aprender, se dieron las cosas para que 2 de mis bebés (mis obras, qué lindo suena) estén incluidas, gracias al apoyo de mi hermano, Vicente, y de mi actual pareja, Armando, así que en pocos meses podría haber otro giro en el camino.
Lo otro bueno es que estoy entregando mis trabajos a una tienda de artesanías de por aquí y, hasta el momento, se han vendido 2 brazaletes y, recién ayer, una bufanda en nuno fieltro, lo que me puso muy contenta y recuperé el optimismo que se me estaba escapando. Y, ya que lo del fietro húmedo (el nuno, que es mi favorito) estará detenido, me estoy volcando hacia el agujado y empecé a  hacer un pesebre pequeño. Además, encontré un nombre y crearé una página en Fb para mis trabajos prontamente. Poco a poco, se van abriendo puertas.
Me despido, dejando unas fotos de cómo me siento en estos momentos: un caracol que, después de la lluvia, sale lentamente a recorrer el jardín, confiado en encontrar lo que le haga falta en el camino, porque lo que necesita, su hogar, va siempre consigo.



martes, 18 de marzo de 2014

Al borde del camino

Muchas veces, vamos tan apurados pensando en las cosas que tenemos que hacer, lo pendiente, o ensoñando en lo que nos gustaría que sucediera (lo que no está mal) y nos perdemos lo que hay alrededor, lo que nace, crece y vive sin ni siquiera percatarnos que existía, dando por sentado que no es tan importante como nuestros asuntos... Sin embargo, la vida, por pequeña que parezca, tiene su papel que jugar incluso cuando no lo sintamos muy a menudo. Y la belleza está más cerca de lo que creemos comúnmente...
Mi invitación es a echarle una mirada y, si se puede, sentir los olores de aquello que hay al borde del camino por donde transitamos; a reducir un poco el paso y observar los pequeños mundos que también tienen su afán y sus colores que mostrar. Creo que es una forma de recordar que todos somos importantes  en este mundo y de dar gracias por aquello que damos por sentado y que, ilusamente, pensamos que jamás perderemos (vista, olfato, oído, el caminar,¡la vida!).
Las imágenes que acompañan este post son de una caminata por las calles de Temuco, antes de regresar a mi casa con mis gatos y mi pareja, con el corazón llenito y contento, siguiendo mi brújula interior.